TIPS DE BELLEZA
DORMIR = BELLEZA (LA FÓRMULA PARA ESTAR MEJOR)
Se te ve más linda, ¿qué te hiciste?” ¡Enhorabuena! Ya no se
trata de pociones mágicas ni de costosos productos rejuvenecedores sino de
descanso y relax. Es que se supo que dormir no sólo es placentero... sino que
además potencia nuestra belleza y atractivo. Así lo demuestran los últimos
resultados de un estudio hecho en el Karolinska Institute de Estocolmo. Según
el experimento sueco, los efectos de un buen sueño influyen marcadamente en la
imagen que damos. El mito de La bella durmiente finalmente fue confirmado.
Para el estudio se compararon fotografías de personas de
entre 18 y 31 años, y se observó que quienes no tenían un buen sueño lucían
menos atractivos, su salud declinaba y drásticamente se veían más cansados.
“Sabíamos que el sueño podía afectar los niveles de cansancio, pero no que
también podía afectar los del atractivo o la percepción de salud”, declaró John
Axelsson, científico especializado en sueño del departamento de neurociencia de
la universidad y jefe de la investigación. “Dormir es un tratamiento de belleza
barato y efectivo –declaró Axelsson–, es más, podría ser visto como el
tratamiento natural de nuestro cuerpo y la alternativa perfecta para otro tipo
de tratamientos de belleza”, agregó.
¿Los efectos del buen dormir? Los ojos lucen más abiertos,
los músculos relajados, la piel hidratada y, por sobre todas las cosas, las
arrugas están menos marcadas. “Dormir bien le da a una persona una imagen más
atractiva y sana, y una persona sana es la que más atrae. Está en la naturaleza
del ser humano, es una cuestión de supervivencia natural”, confirma el
neurólogo argentino Javier Domínguez, especialista en medicina del sueño del
Hospital César Milstein y expresidente de la Asociación Argentina de Medicina
del Sueño. Domínguez declara que “una persona que está descansada tiende a ser
más sana y a verse mejor. A estos efectos físicos se le suman la estabilidad y
el humor que se logra. Es que cuando la personalidad tiende a ser más sólida es
porque aprende a inhibir los momentos de mayor estrés. Eso hace que uno tenga
mejor relación con su entorno, se vea más atractivo y sea más aceptado
socialmente”.